¿Por qué no probar un té Chai?

Imagínate esta escena: las calles están llenas de puestos de comida coloridos, los vendedores te ofrecen sus deliciosos manjares, y los olores cálidos y fragantes de sus especias. Aunque es temprano en Kolkata, India, la temperatura del aire ya se siente abrasadora. Entre las masas que deambulan, hay un puesto que atrae a la gente.

Bebe y lanza el vaso

A medida que me acerco, observo que el vendedor distribuye un líquido marrón hirivente, de textura sedosa, en tazas de arcilla pequeñas. Los clientes compran su té, se lo beben, y luego lanzan su taza bruscamente al suelo donde se rompe. Después de haber presenciado este proceso, pude observar una gran colección de fragmentos de arcilla roja junto al puesto de té y la calle.

Los chaiwalas

Los chaiwalas, o vendedores de té, tienen puntos de venta en cada esquina de las calles en la India. Pueden preparar y servir el té en un puesto fijo, un carro de comida o un tenderete. A veces, hay personas que deambulan por las calles llevando una gigantesca tetera caliente y un cubo con tazas de barro. No importa cómo te sirvan su té, los chaiwalas son un icono de la cultura culinaria hindú. Introducido durante el gobierno británico del siglo XIX, el té es la bebida más popular de la India — ¡el país consume 837,000 toneladas cada año! La India es también el segundo mayor productor mundial de té, 70 por ciento de su producción se dirige al consumo interno.

Ingredientes

Esta bebida tradicional hindú mezcla té negro con leche hirviendo y especias tibias del sur de Asia, tales como:

• canela
• anís
• jengibre
• cardamomo
• hinojo
• pimienta negra

La combinación particular de especias varía de una región a otra. Los vendedores suelen crear su propia mezcla para ofrecer a sus clientes sedientos. Las familias también pueden hacer su propia receta en casa, o en el trabajo, y consumen varias tazas (de papel o de arcilla) a lo largo del día.

PARA HACER UNA TAZA DE CHAI DE 8 ONZAS

• • 3/4 taza de agua
• • 1/4 taza de leche entera
• • 2 cucharaditas de hojas de té negro sueltas (idealmente Assam o Ceylon)
• • Algunas o todas las siguientes especias: 2 vainas de cardamomo verde, 2 o 3 granos de pimienta negra enteros, 1/4 cucharadita de semillas de hinojo, 1 o 2 palos de canela fresca, 2 o 3 rebanadas finas de jengibre fresco

Calienta el agua y la leche juntas. Antes de que la mezcla hierva, añade el jengibre y las especias. Una vez que empiece a hervir, agrega las hojas de té sueltas. Apaga el fuego y deja reposar durante dos minutos. Vierte en una taza a través de un colador para eliminar las hojas de té y las especias. Agrega azúcar al gusto. ¡Disfruta!

La búsqueda del tesoro

Mientras veía los restos de tazas de arcilla que se acumulaban junto al puesto del chaiwala, me acerqué a los escombros, decidido a encontrar una taza intacta para guardar como recuerdo de este delicioso té. Tras husmear en los escombros (e intentando no llamar la atención), ¡encontré tres tazas intactas! Coloqué las frágiles tazas con cuidado en mi mochila. Luego inicié el regreso a casa, en un viaje de 11.200 kilómetros con tres escalas y horas interminables de películas a bordo.

Lo último en reciclaje

Al llegar a mi destino, estaba ansioso por comprobar el estado de mis valiosos tesoros de arcilla. La primera que desenvolví estaba hecha polvo. En ese momento me di cuenta de la sabiduría de los clientes al tirarlas al suelo, pues como la arcilla es un material crudo, las tazas se hacen polvo fácilmente, y con un buen barrido y la lluvia, los restos vuelven a la tierra. ¡Lo último en reciclaje!

¿Puedes ver las esquirlas de arcilla de las tazas en esta foto?

Al abrir mi segunda taza, descubrí que se había roto en tres pedazos. Otra pérdida. Sin embargo, y para mi alivio, la última llegó intacta.

He puesto mi pequeño tesoro en una estantería de mi casa y le he rendido homenaje a su increíble viaje, haciendo mi propia versión de auténtico té chai hindú. Puedes probar tu propia receta, pero si quieres el auténtico, debes visitar a los chaiwalas. ¡Bebe directamente de la taza de arcilla y no olvides lanzarla contra el suelo cuando termines!

Traducción de ProZ Pro Bono

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